Ayer se concedieron los premios ‘Fútbol Draft’ asociación que apoya y reconoce el trabajo realizado por la cantera y los jóvenes futbolistas. Como era de esperar hubo un gran triunfador en el evento: la Real Sociedad.
Contrasta esta noticia con otra que se ha conocido en los últimos días: es un secreto a voces, Phillipe Montanier se va al Rennes. Parece ser que el francés no está contento con la forma en que lo ha tratado la afición vasca, dándole la espalda al menor contratiempo y pidiendo su destitución tanto la temporada pasada como ésta. El técnico ha sabido, mediante trabajo, cambiar los pitos por aplausos. Ha conseguido que cada vez que se hace un cambio haya una ovación para el jugador sustituido, y es que la temporada de la Real Sociedad sólo tiene un calificativo: brillante.
No sería justo atribuir todo el mérito a Montanier, pues fue Martín Lasarte el padre de este grupo, consiguiendo el ascenso y el año siguiente la salvación. Pero sí sería injusto negar que el técnico francés le ha dado un toque diferente a este equipo, haciéndolo jugar en dos temporadas con un estilo brillante, basado en el fútbol ofensivo, el buen trato del balón y la calidad técnica de sus jugadores. Y lo que más gusta a la afición: la base del equipo es de la cantera de Zubieta, que junto a unos cuantos refuerzos no canteranos han hecho una conjunción perfecta que hace que el equipo esté luchando por entran en Liga de Campeones a falta de dos jornadas, dependiendo de él mismo.
En la portería un año más ha cumplido el veterano Claudio Bravo. La defensa es uno de los puntos fuertes, con dos laterales ofensivos que se incorporan al ataque como De la Bella (izquierda) y Carlos Martínez (derecha) y dos centrales que se complementan a la perfección: Mikel González e Íñigo Martínez. El primero aporta fuerza y contundencia. El segundo es uno de los centrales más prometedores de España, llamado a ser el futuro central de la selección, es fundamental en la salida de balón jugado desde atrás sin dejar de ser contundente. La precisión de su pierna zurda es tal que no duda en disparar desde su propio campo, habiendo conseguido ya de esta forma dos goles.
El centro del campo tiene un nombre clave: Asier Illarramendi, jugador que a sus 23 años en San Sebastián recuerda a Xabi Alonso, ya que canaliza todo el juego del equipo y domina a la perfección el pase largo. Junto a él, el ‘trabajo sucio’ lo ha desempeñado Markel Bergara. Ha contado también con bastantes minutos la perla de la cantera Rubén Pardo, que con 19 años demuestra un desparpajo que hace prever un futuro jugador grande.
Sin duda la mediapunta es la zona de más calidad del equipo. Tres nombres claves. Xabi Prieto, el capitán y líder del equipo está viviendo una segunda juventud, se le ve disfrutar sobre el césped cada partido, y su calidad hace disfrutar al aficionado. Griezmann: talento, regate, movilidad, llegada, pase...está siendo su gran año. Y Carlos Vela, la temporada de su vida, 14 goles e infinidad de asistencias pero sobre todo fantasía en su juego. El cuarto en discordia, Chori Castro, no ha sido habitualmente titular pero ha sido el jugador número 12, aportando velocidad, desborde y goles. Con menos protagonismo debido a las lesiones ha contado este año Zurutuza.
Una de las sorpresas ha sido Agirretxe, ya que comenzó la temporada sin mucho protagonismo, pero a base de goles (ya lleva 13, algunos de muy bella factura) se ha hecho con un puesto fijo. Un recambio habitual en las segundas partes ha sido el uruguayo Diego Ifrán.
Con la marcha de Montanier queda la duda de qué será del equipo el próximo año. Se antoja fundamental la elección de entrenador continuista con la línea del francés. Independientemente de la clasificación o no para Liga de Campeones, la buena situación económica del club hace que no se tema por la salida de jugadores importantes, sólo venderían si llegan buenas ofertas. En San Sebastián están de enhorabuena: la juventud de la plantilla y el buen trabajo realizado en la cantera garantizan el futuro.
